Azul Humano

Laverne

Me siento tan azul que el cielo obliga a las nubes mirar al suelo.
azul como el mar triste que empuja al delfín a tomar sol en la playa.
 
Siento que detrás de la colina, hay más colinas, que estas tierras
de infinitos sufrimientos, albergan las lágrimas más justa de la  tierra.
 
Pero, como represento al azul más triste de la tierra,
me siento acuerpado por este sufrimiento milenario,
estas lágrimas se incorporan al azul de mi cuerpo,
por estas raíces humanas que me amarran a la tierra.
 
Cuando veo el cielo no tengo pena, tengo pena por tu olor ausente.
Tu olor de mar y cielo, tu olor lo siento al ver el horizonte
sentado en estos muertos indios, en  la sangre que circula
como ríos subterráneos, que beben ciudades enteras.
 
Siento que puedo ver el orgasmo azul del mar besando al cielo desde mi montaña.
Pero yo estoy más azul, más azul que el cielo y el mar.
 
Estoy tan azul, que puedo morir sin pena con un fusil y un amor frustrado.
Este amor tan puro, tan noble, de humanos enterados en la memoria de libros ausentes.
Ausentes como tu olor, ausentes como mi pena injusta, ausentes como balas frustradas.
 
Odio tener la memoria azul, odio leer la sangre en las raíces de mi mente.
 
Estoy clandestino en mi cuerpo, nadando en lo más azul de mis amores tristes.
Amores humanos, amores de una lucha justa, la lucha por tu piel en mis manos.
 
La lucha por la liberación de mis ríos subterráneos,
por está violenta ganas de ser humano.