La deuda ajena

Eduardo Galeano

Mayo
14
 
 En el día de hoy de 1948, nació el estado de Israel.
 
 Pocos meses después, ya había más ochocientos mil palestinos expulsados, y más de quinientas aldeas demolidas.
 
 Esas aldeas, donde crecían los olivos, las higueras, los almendros y los árboles frutales, yacen sepultadas bajo las autopistas, los centros comerciales y los parques de diversiones. Son muertas sin nombre. El Comité de Nombres de las nuevas autoridades ha rebautizado el mapa.
 
 Ya poca Palestina queda. La implacable devoración del  mapa invoca títulos de propiedad, generosamente otorgados por la Biblia, y se justifica por los dos mil años de persecución que el pueblo judío sufrió.
 
 La cacería de judíos fue, siempre, una costumbre europea; pero los palestinos pagan esa deuda ajena.
 
Los hijos de los días